Mientras tanto, en twitter...

    ¡Más twitter!

    23/11/06

    Inasequible al Desaliento

    Vale, ¿Quién mierda fue el primer listillo en usar esa frase? "inasequible al desaliento", osea, su significado es que "no se cansa aunque le digan que pare, que ya le vale", ¿Por qué no decirlo directamente así?... "pues porque el vocabulario español es mu rico y..." nanana, no me vegais con esas, vale, que esta bien tener vocabulario y esas cosas bonitas, pero hasta cierto límite, que esta es de esas frases que la gente dice sin pensársela, a ver, quien coño dice inasequiable en otros momentos de su vida?... na "inasequible" ya forma una lexía textual con desaliento y viceversa; no nos importa el significado de cada palabra si no su conjunto. ¿En que otros momentos la gente puede decir desaliento?, ni siquiera desalentador resulta más jugoso al a hora de construir una frase, "el paraje resultaba desalentador", na, a la mierda; como mucho "el paraje resultaba desolador", pero ni si quiera; lo que diríamos sería "la muvi parecía una chufa".

    Con inasequible pues tres cuartos de lo mismo, "me compraría esa bicicleta, pero por su elevado precio me resultaba inasequible", na lo que en realidad decimos es "me pillaría la muvi pero su precio era una chufa". Si es que pa qué usar más.

    Tenemos en mi casa un nuevo diccionario de dos volúmenes que ocupa un espacio vital en la estantería innecesario, lo he estado ojeando y para mí que el listillo ese de Manuel Seco, el autor, se ha inventado palabras nuevas para rellenar "oye Manolo, que la letra Q nos ha quedado muy sosa", "pues nada, escucha, emmm... quelato, quejumbre y lo de los indios, quechua, además esta última tambien la podemos meter en la K, las otras ya les buscamos algún significado".

    Además ojeando el diccionario de marras me he fijado que lo empezaron muy animaos pero fueron perdiendo las ganas a medida que iban avanzando; tiene dos volúmenes de igual grosor; el primero contiene las letras de la A a la F y el otro de la G a la Z, osea, en el primer tomo hay seis letras y en el otro las ventitantas restantes, lo que digo, ya veo al Manuel Seco con su equipo: "tiooooos, ¡Vamos a hacer un diccionario que se ma han ocurrido unas definiciones chulas para Ábaco y Acarreo!" y a los días "joé, que bien nos ha quedao la A, menudo tocho, ya creíamos que Azuzón no nos entraba, pero dijimos, vengaaa, vamos a tirarnos el moco que esto es pa la cultura; ahora la B pues igual de tocha, que ayer en el bar se nos ocurrio una definición wapa para Bebercio..." y a los días... "mmm... pues la B no nos ha quedado tan grande, pero tiene ahí muchas palabritas, sip, hemos estado recopilando y están todas". Pasan los días y se van casando, "pues... digo yo de pasar de la H, que como es muda pues nadie se dará cuenta, no?..." y así hasta llegar a la situación antes mencionada, la de inventarse palabras en vez de buscar alguan que existan e ir disminuyendo el número de palabras en cada letra a medida que avanza el diccionario.

    Pues eso, mi consejo de hoy, que con el mundo de las imágenes pues no tiene que ver ná pero yo ya me meto en todos los fregaos; mi consejo es que disminuyais vuestro vocabulario, que no sirve para nada, que deberíamos coger un diccionario de sinónimos y quedarnos solo con una palabra de cada lista y las demás pues tacharlas, ¿que parece una tontería? ¡Pues si no nos quejamos cuando la Moneda Común no teneis motivos para quejaros de esto!... y el café ya me vale 1'10 €; si ya os lo dijeeee, que el redondeo es el mal menoooor, ¡Que luego los precios subirán todavía más! Pues ahí estamos, y del ir al cine ni hablar... Bueno, que me da que se me esta pirando de nuevo, ya hablaré de esto en otro momento. Chao

    14/11/06

    Prison Freak


    Bueno, pues hoy acaba de terminar en el canal Fox de Spain la primera temporada de Prison Break, para los incultos que prefieren leer un libro antes que encender la tele diré que es una serie que están emitiendo sobre un grupo de presos que intentan fugarse de una carcel, entre ellos un condenado a muerte, Lincoln Burrows -ver imagen adjunta-.
    Tranquilos por los que todavía no ha visto el final, no voy a desvelar nada, y si alguien hace un comentario le pediría que tampoco mencionase nada por respeto a los idiotas que todavía no han visto el final. Hasta que lo veais os quedareis con la duda de si se cumplió mi premonición de que el avión de huida tendría problemas con el tren de aterrizaje y que por unaminidad se decidiría utilizar a Michael "tengo-expresión-de-estar-oliendo-un-pedo" Scofield como sustituto quedando horriblemente desfigurado.
    Con el fin de esta temporada me libro por fin de un lastre televisivo, sí, desgraciadamente me engancho a las series con mucha facilidad, sobretodo a las nuevas que hacen los americanos que en cada capítulo acaba en plan "y que pasará en el siguiente? aaaaah!". El mayor intento de hacer una serie de ese estilo en españa fue la de Persivos Motonales de Lydia Bosch -no confundir con la marca de lavadoras-, que solo vi un capítulo, parecía interesante, pero metían demasiado rollo culebroniando de "estoy liada con este, pero soy la mujer de su padre y el jardinero me hace ojitos". Lo cual parece que es la única manera de que triunfe en España una serie de ese tipo. Ya me jodieron los índicies de audiencia la mediocre "El Pantano" y la cojonuda "El Grupo"... como decís? que no os suenan? encima no me toqueis los cojones... Creo que decían en Scary Movie "Ver películas no crean psicópatas, los psicópatas se crean cuando cancelan sus series favoritas"... Ah, cuanta razón, alguien me pasa ese cuchillo?.

    Dándole vueltas a una posible serie de ese estilo, osea que cada final de capítulo te incite a ver el siguiente, se me había ocurrido que podría funcionar una adaptación de la saga de Videojuegos Mortal Kombat, el problema es que últimamente estoy jugando a la última entrega de dicha saga y entonces todas mis ideas giran entorno al mundillo de dicho juego, así que entre otras ideas tambien se me había ocurrido "Mortal Kombat: El musical de Broadway" -con gran número músical "yo te enteregaré mi corazón, pero no sin antes arrancarte el tuyo en un Fatality"- y "Mortal Kombat: Juguetes Playskool", creo que el cuhillo destripador tendría gran éxito entre los niños de 0 a 3 años; por supuesto el cuchillo sería de plástico para que tengan diversión durante horas intentando matar a sus compañeros, si fuese de metal lo tendrían más facil y perdería la gracia.

    Pues eso, que yo os animo a que dejeis los libros, que es algo completamente desfasado y emepeceis a abrazar las nuevas tecnologías, pero no las abraceis cuando estén mojadas, que pueden dar calambre!

    3/11/06

    Cuento de Hadas. Capítulo I: Respuesta.

    Capítulo I: Respuesta

    Erase una vez que se era, en un reino muy muy lejano… ¿Sabes dónde está Lugo?, pues este reino estaba lejos de Lugo, así que imagínate lo lejos que estaba el reino este. En su castillo vivía un príncipe, en los cuentos de hadas normalmente estas personas son altas atractivas y de buen corazón; este no es un cuento de hadas normal. El Príncipe, protagonista de nuestra historia, era bajito, feo y egoísta; en lugar de preocuparse por los acontecimientos que sucedían a sus lacayos, se pasaba las horas meditando sobre El Sentido de la Vida y el secreto de cómo conseguir la felicidad. Sus investigaciones le llevaron a cruzar mares y continentes hasta que descubrió que en la tierra no existía respuesta a sus preguntas. Nuestro protagonista viajó al Reino de los Cielos, que no es la peli de Orlando Bloom, sino el lugar del cielo donde van las almas de los fallecidos que han sido buenas en sus vidas.
    El Principe llegó deprisa, la mayor ventaja de ir al cielo es que no tienes problemas de tráfico, poca es la gente que va, así que no hay aglomeraciones. Aclarar que el viaje de nuestro protagonista no era para siempre, El Príncipe estaba de paso, había conseguido chotearse de las leyes místicas para conseguir un billete de ida y vuelta al cielo ¿Cómo lo consiguió? Ese será otro cuento, de momento centrémonos en este.
    A lo que íbamos, el príncipe llamó a las puertas del cielo rítmicamente y oyó una voz que murmuraba “Estoy hasta los cojones de los graciosos que llaman tarareando la canción de Bob Dylan”, el portero abrió la puerta, miró a nuestro príncipe de arriba abajo e hizo un silencio -¿Qué desea?- preguntó al rato.
    -Soy El Príncipe y deseo entrar en el cielo- contestó
    -Nos ha jodido, te creerás muy especial por querer eso.- El portero miró una pequeña lista que llevaba encima y dijo –no estás en la lista, tenía un Prince, pero está tachado y mi ayudante dibujó un símbolo raro, pero yo no lo entendía, así que taché el símbolo y escribí “el artista antes conocido como Prince”-
    -Si no aparezco en tu lista es porque todavía no estoy muerto- replicó el príncipe –vengo de paso-
    El portero miró su lista -… esto es nuevo, los de abajo ya han vuelto a hacer cambios sin avisar, malditos dogmas-
    -No, me he choteado de las leyes místicas un momento porque necesito hablar con el Gran Espíritu- dijo el Príncipe
    El portero extrañado contestó -¿… Y como has conseguido esa hazaña?-
    -Eso es otro cuento- dijo el Príncipe y se adentró dignamente.
    El Príncipe llegó a una pequeña sala de espera en la cual vio una seña inequívoca de que se encontraba en el cielo: Las revistas no eran atrasadas. Al poco de estar esperando una señorita le llamó a adentrarse por una puerta, el príncipe se levantó, se cruzó la capa por delante del pecho como solo un príncipe sabe hacer y caminó al interior.
    -Buenos Días, ¿Que desea?- preguntó la señorita
    El príncipe contestó “Buenas Tardes”, nuestro protagonista además de bajito, feo y egoísta le gustaba llevar la contraria, esperó un poco para que la mujer osase corregirle y al no obtener respuesta prosiguió.
    -Vengo a ver a El Gran Espíritu-
    -Yo soy el Gran Espíritu- le contestó la mujer.
    -He venido hasta aquí porque tengo una gran pregunta que hacerle…- El Príncipe ya había leído este blog anteriormente y conocía el sentido del humor del narrador, así que no se extraño de que El Gran Espíritu fuese una mujer.
    -Por cierto- le interrumpió El Gran Espíritu –es extraño que recibamos visitas-
    -No es extraño, poned más fácil el acceso coñe, ¡Que para cumplir todas vuestras normas hay que ser una puta piedra!-
    -No me refiero a eso, me refiero a visitas temporales como la vuestra, os pediría que me contaseis vuestra odisea… aunque bueno, eso ya sería otro cuento, ¿no?- dijo Ella.
    -Efectiviwonder, veréis el motivo de mi viaje es hacerle una gran pregunta…-
    -¿No queréis sentaros?- interrumpió El Gran Espíritu
    -No gracias, mi viaje ha sido cómodo y no estoy cansado- contestó El Príncipe –Vereis la gran pregunta que quiero hacerle es…-
    -¿Una taza de té?- volvió a interrumpirle.
    -No gracias, no es la hora del té- El Príncipe esta vez contestó más exasperadamente, comprendió que sus preguntas no eran por amabilidad, sino que El Gran Espíritu se divertía vacilándole. El Príncipe se preguntaba porque esa actitud, si por haberse pasado por el forro sus leyes místicas sobre como llegar a este lugar, si por haber criticado sus normas para ir al cielo o simplemtente por haberle contestado “Buenas Tardes” en lugar de “Buenos Días”. El Príncipe prosiguió –Me gustaría saber cual es el secreto de la felicidad-
    El Gran Espíritu caminó hacia una cómoda butaca, cruzó una pierna por encima de la otra, junto las yemas de sus dedos y contestó: -Tratar bien y respetas a todas y cada una de las personas de la tierra, con buenos actos serás recompensado con la felicidad-
    -Hablo en serio-
    -Yo también- aclaró El Gran Espíritu con una sonrisa.
    -Mmmpf- refunfuñó El Príncipe –¿Eso implica estar cerca de los enfermos?-
    -Sí-
    -¿Cuidar de los niños?
    -Sí-
    -¿Tocar ancianos?
    -Sí-
    Esta última afirmación el Gran Espíritu la acompañó con una amplia sonrisa, El Príncipe entendió por primera vez el significado de la expresión “una sonrisa de oreja a oreja”, si El Gran Espíritu usase gafas podría haberse mordido las patillas sin ingun problema.
    -¿… Y tendré la felicidad eterna?- inquirió nuestro protagonista.
    -No solamente cada día que pases serás más feliz que el anterior, sino que además en caso de fallecer vendrías al cielo automáticamente- aclaró ella.
    -… ¿… Y tengo que tocar ancianos?- El Príncipe, mientras decía estas palabras, puso una cara de repugnancia exagerada igual que sincera.
    -Sí-
    En esta última afirmación El Príncipe vió un rasgo claro de divinidad en ella; tenía la dentadura completamente perfecta, pudo observar que sus muelas del juicio habían salido sin ningún tipo de problemas; eso sí que era una sonrisa.
    -mmm… gracias por la información- dijo El Príncipe, el cual por fin había encontrado la respuesta que buscaba; el problema era que no le molaba. Prosiguió hablando –Ha sido un placer verle, me tengo que marchar, Buenos Días-
    -Buenas Tardes- contestó ella.
    El príncipe salió de la habitación dispuesto a buscar un sistema para encontrar la felicidad más de su agrado… ¿Dónde encontrarlo?.




    [Nota: He tenido problemillas con la imagen que acompaña a ese capiítulo, en algún momento lo editaré y la pondré; ahora mismo creo que debería estar estudiando el examen que tengo mañana]